Escultura en madera tallada y policromada de San Antonio con el Niño o San Antonio de Padua.
Talla de bulto redondo, tipo chuleta, pliegues rectos y rostro fino; niño con cierta robustez, mano en el pecho (corazón) y mirada al frente. Policromía con la técnica del estofado, base de preparación donde colocan las láminas de oro y encima los colores y dibujos del manto, dejando ver algunas zonas de la capa inferior dorada. Rostros, manos y niño con las carnaciones.
La escultura se apoya en una peana también de madera policromada y dorada de forma triangular con molduras talladas en la base y zona superior. Hornacina para apoyar sobre una superficie o para colgar en la pared, frente policromado, en forma de arco con remate de venera dorada tallada, laterales rocallas grandes caladas talladas y doradas; base moldurada y remate dorado de tornapuntas.
Encuadramos esta pieza en el siglo XVIII segunda mitad, dentro del barroco por su forma de realizar la pieza y motivos decorativos, camino hacia un Clasicismo en la hechura del Santo.